miércoles, 29 de enero de 2014

Uk'u'x Ulew - Obra Escénica del Grupo Sotz'il


Los elementos naturales manifiestan su energía a través de cantos, melodías y movimientos, engendran la vida y la hacen danzar. Traza su camino en la esencia de la Madre Tierra al ritmo y claridad de la Abuela Luna, camina cautelosa por el aullido preventivo del perro ante el presentimiento de la disonancia creada por una fuerza contraria”.

Obra escénica del Grupo Sotz’il puesta en escena desde el 24 de noviembre del 2013 en el Centro Cultural Sotz’il Jay en acto de intercambio comunitario con población procedente de caseríos de Chotaq’aj y en el Festival de Arte de Pueblos Originarios “Ruk’u’x” celebrado en la ciudad de Sololá el 30 de noviembre del mismo año.

En el proceso de creación de la obra destaca el acercamiento comunitario y colectivo desde la experiencia vivida por diversas poblaciones de Guatemala  desde su conexión con la “Madre Tierra” entrelazando con los valores ancestrales desde la Cosmovisión Maya y los problemas que afronta actualmente.

La obra ha sido también un proceso de validación desde el conocimiento de ajq’ijab, lideres comunitarios, curanderos, comadronas, agricultores así como varios grupos y artistas individuales procedentes de diversas ramas del Arte Guatemalteco haciendo destacar la obra como creación colectiva ancestral del Arte Maya Actual.



viernes, 10 de enero de 2014

Ciudad de la Imaginación en Quito Ecuador


En junio del 2013 Ciudad de la Imaginación inauguró su nueva sala de exposición junto con el proyecto Estados de Excepción. Este mes se presentará la exposición itinerante en Quito en la salas de exposición de Arte Actual. En esta exposición participará también el  artista ecuatoriano Yauri Muenala.

Estados de excepción es un proyecto poliédrico atravesado por la investigación, la producción de obra, un proyecto expositivo itinerante, la publicación de un libro y un trabajo cinematográfico dirigido por Sergio Ramírez. 

La mayor parte de las obras expuestas se han desarrollado desde espacios “rurales” – a veces invisibilizados por el sistema del arte – respondiendo también a visiones del mundo que desde lo ritual, lo comunitario o desde cosmovisiones decolonizantes cuestionan los grandes relatos de la modernidad. De esta manera, se propone abordar preguntas fundamentales como ¿quién y desde dónde se legitima el arte? ¿qué significa ser contemporáneo? ¿qué función se le atribuye al arte desde las culturas indígenas? buscando integrar en la exposición desde una dimensión cultural y política la dimensión estética de esas otras historias disidentes.

La exposición se inaugura en Arte Actual el 14 de enero de 2014 a las 19 horas y estará abierta hasta el 6 de febrero de 2014. 

Artistas: Fernando Poyón, Manuel Chavajay, Norman Morales, Nora Pérez, Reyes Josué Morales, José Luis Dardón, Guillermo Santillana, Edgar Calel, Sandra Monterroso, José Míguez, Sergio Ramírez, Yauri Muenala


Estados de excepción es un proyecto poliédrico atravesado por la investigación, la producción de obra, un proyecto expositivo itinerante, la publicación de un libro y un trabajo cinematográfico. En esta ocasión se presenta en Arte Actual el trabajo de varios artistas contemporáneos guatemaltecos y artistas ecuatorianos invitados.

La mayor parte de las obras expuestas se han desarrollado desde espacios “rurales” – a veces invisibilizados por el sistema del arte – respondiendo también a visiones del mundo que desde lo ritual, lo comunitario o desde cosmovisiones decolonizantes cuestionan los grandes relatos de la modernidad.

De esta manera, se propone abordar preguntas fundamentales como ¿quién y desde dónde se legitima el arte? ¿qué significa ser contemporáneo? ¿qué función se le atribuye al arte desde las culturas indígenas? buscando integrar en la exposición desde una dimensión cultural y política la dimensión estética de esas otras historias disidentes.


domingo, 5 de enero de 2014

Ri Ak’u’x expresa el arte indígena y rural

Por Siglo 21

La recuperación de la cultura ancestral, divulgando expresiones artísticas vivas que surgen en las comunidades rurales e indígenas es el objetivo del movimiento Ri Ak´u´x, que agrupa a creadores artísticos de casi todas las etnias y culturas rurales de Guatemala.

El cineasta y artista de los barriletes de Sumpango Victorino Tejaxún, uno de los organizadores del movimiento, cuenta que este se constituyó para dar continuidad al legado de Lisandro Guarcax, quien dedicó su vida a investigar y recopilar elementos del arte prehispánico que se integran en el trabajo de Sotz’il, grupo fundado por Guarcax.

Otro organizador, Otto Xitumul, afirma que han unificado a agrupaciones de diferentes comunidades lingüísticas y orígenes, comprometidas con la recuperación del arte de los pueblos originarios, “conservada por nuestros abuelos y abuelas”.

Benigno Simón, compositor y representante del grupo de rock maya Aj Batz´, señala que el arte indígena debe tener relevancia en una sociedad multicultural como la de Guatemala. Según dice: “Enfatizamos en que la expresión artística de los pueblos indígenas no es una muestra de folclore, sino de arte vivencial”.

“Una historia de despojo y opresión ha sido el cimiento para que los pueblos originarios fortalezcan su identidad común, y en este caso esto se manifiesta a través del arte”, afirma Simón.

Los rostros de Ri Ak´u´x

El movimiento aglutina a mayas de todas las etnias de Guatemala, quienes se expresan a través de las más variadas manifestaciones artísticas: cine, danza, teatro, música ancestral y rock maya, artes plásticas y fotografía entre otras.


Dos de ellos son Verónica Salcaxot, una de las primeras mujeres mayas que se dedica al cine y Edgar Calel, joven artista visual de Comalapa.

Ella es una joven que aparenta ser reservada y seria, aunque a los pocos minutos de platicar, la sonrisa brota de su rostro. “Comencé estudiando Comunicación en la Universidad Mesoamericana de Xela, donde nací y me crié. Realicé estudios de teatro y luego gané una beca para aprender cine en Casa Comal, patrocinada por la Embajada de Noruega”, cuenta Verónica.

No se considera una feminista radical, pero la problemática de las mujeres y las teorías de género son dos elementos constantes en su formación y en su trabajo cinematográfico.


Como parte de su vínculo con los temas de género, la cineasta participa en un colectivo llamado Lemow (espejo, en kakchiquel), integrado por mujeres mayas.


Según la cosmovisión Maya, no debe existir división entre los hombres y las mujeres, “que son complementarios, por lo cual los compañeros han apoyado mucho la existencia de este colectivo”, afirma Verónica.

Al preguntarle sobre el cine maya, que hasta hace muy poco tiempo era inédito en Guatemala, menciona que es parte de un colectivo llamado Grupo Red de Cineastas Mayas (Recma), con participantes de diferentes etnias.

Su visión sobre el quehacer cinematográfico la resume en estas palabras: “Todos tenemos historias que es importante dar a conocer, denunciar y mostrar nuestra historia pasada y reciente, tanto lo negativo como lo positivo, que también existe. Queremos ser hombres y mujeres que aporten a la cultura de nuestros pueblos mayas y de nuestro país. Así veo el cine”.

Édgar Calel, integrante del proyecto Kamin, de Comalapa, es un artista que ha colaborado con el movimiento. Durante un tiempo, fue a todas partes llevando colgada de su cuerpo una piñata en forma de quetzal, que canjeó por un trabajo suyo. Nacido en “tierra de pintores”, es hijo de Pedro Calel, artista representativo del municipio.

Estudió en la Escuela Nacional de Artes Plásticas (ENAP) y obtuvo una beca en Nicaragua. Ha estudiado en academias de Argentina y Brasil. Ahora alterna el trabajo agrícola en la propiedad familiar con la experimentación artística.

“En la casa vivimos 13: padres, abuela, hermanos y yo. Todos pintamos y todos trabajamos la tierra”, afirma y agrega que la solidaridad es una práctica sin compromisos pero recíproca entre los pueblos mayas.

Es maya kakchiquel, por lo cual practica la espiritualidad ancestral. “Hemos perdido la sensibilidad de lo sagrado que puede ser cada momento. Cada acción que realizamos es un ritual”, afirma Edgar, quien considera que en el panorama político actual no hay opciones para la juventud.
En cuanto a la situación de los jóvenes y el futuro, considera: “Te diseñan la vida para estudiar, graduarte y trabajar, pero después resulta que no hay empleos ni oportunidades. Lo que uno desea es que todos los que estamos trabajando podamos tejer un mundo donde el futuro sea más colectivo”, concluye.
Así lo dijo:

  • “La primera vez que uno escribe, casi siempre se refiere a su vida”— Verónica Antonieta Sacalxot Chojolá, cineasta k’iche’
  • “Respirar diferentes aires me ha dado más seguridad y una visión más amplia.”— Edgar Calel, artista visual

Revalorizar lo autóctono a través de la música

Por Siglo 21

Originario de San Miguel Chicaj, Baja Verapaz, Job Sis es un compositor achi´ con una obra que abarca muchos campos de expresión y estilos musicales. En 2013 se estrenó Maya, donde nace el Sol, película cuya banda sonora fue compuesta por Job Sis, cuya obra Tradición Moribunda fue interpretada por la Estudiantina de la Universidad de San Carlos en el Concierto Homenaje a Árbenz.

Cuando el director de cine Elías Jiménez inició el proyecto para filmar Maya, donde nace el Sol, Casa Comal comenzó a buscar un compositor indígena, porque la película se enfoca en la cultura ancestral.
“Al principio tuve dudas de aceptar, porque necesitaba verla antes de decidir participar en algo en lo que no estuviera de acuerdo. Al observar la película, me decidí y compuse los temas: la introducción, el argumento y el final, además de varias piezas pequeñas para violín, piano y guitarra”, explica.

“No puedo dejar de mencionar a otros músicos que participaron en este trabajo, como la cantante Gervin Galicia, quien interpreta varias canciones; Fernando Vásquez, con la marimba; Armando Buchán, con vientos y los instrumentos de Carlos Chaclán, que aportaron muchos efectos”.

La característica de sus composiciones es la fusión de lo autóctono con lo clásico, pero también con jazz y rock. En una sociedad bastante conservadora, sus propuestas han sido cuestionadas, especialmente al fusionar estos ritmos con la marimba.

Su estilo de composición surgió como consecuencia de sus diversas experiencias. Fue director artístico del grupo Sobrevivencia, que incorporó los idiomas mayas a la interpretación de música rock, fusionada con reggae, country, sones criollos y música de marimba.

Historia y ficción
La trama de la película mezcla la historia reciente y la pasada con una obra de ficción creada por el cineasta. Se inicia con la invasión española, transita por las etapas más represivas de la historia y termina cuando los mayas logran encontrar un espacio de poder que hace renacer su cultura.


Los represores del pueblo indígena son representados inicialmente como soldados españoles, quienes se transforman en el ejército que masacró a poblaciones indígenas hace algunas décadas.
Los espíritus ancestrales también son representados en esta producción cinematográfica, donde aparecen como los protectores del pueblo maya que terminan con los soldados.

Concierto con la estudiantina
Para Job Sis es importante participar en eventos gratuitos. Durante todos los años de su trayectoria ha mantenido vigente el compromiso con los sectores más excluidos y considera de gran relevancia que la música de calidad pueda llegar a todos.


De ese compromiso y de la necesidad de rescatar algunas costumbres que comienzan a perderse surgió la obra Tradiciones moribundas, que la Estudiantina de la Universidad de San Carlos de Guatemala presentó el 22 de junio, en conmemoración del centenario de Jacobo Árbenz Guzmán.

“Esta obra nace de dos situaciones: el recuerdo de los toques de campana que se hacen en mi pueblo para anunciar cuando hay un difunto y la situación actual, donde todas esas tradiciones se van perdiendo. Antes, cuando moría un indígena, las campanas tocaban determinado ritmo; igual cuando moría un niño. Actualmente solo quedan dos toques: para cuando muere un adulto y cuando muere un niño”.

El niño que escuchaba música en la cofradía
Job Sis llegó a la capital becado por el Instituto Indígena Santiago, de la orden Lasalle, para estudiar los básicos. “Traía una formación musical, sobre todo en marimba, pero no conocía que la música puede ser un espectáculo ni su componente académico”, refiere.

Fue el maestro Dionisio Arévalo quien le sugirió que completara su formación en el Conservatorio Nacional de Música, adonde comenzó a asistir cuando ya había completado el tercero básico.


Su relación con la música data de su primera infancia, porque es hijo de dos cofrades. Sus primeros años transcurrieron cerca de las cofradías, donde pudo observar a sus primeros maestros, dos marimbistas llamados Francisco Hernández y Juan Vásquez, quienes tocaban desde las seis de la tarde hasta las seis de la mañana en las actividades de la cofradía, unas tres veces por semana.

Comenzó a acercarse a estos músicos, quienes le enseñaron los primeros secretos de la interpretación y contribuyeron a formar su vocación de músico y compositor.

Licenciado en Música por la Universidad de San Carlos, nunca ha dejado de estudiar y de actualizarse, pero también mantiene vigente el interés por sus ancestros y una de sus actividades principales es recopilar todos los elementos de la música autóctona que puedan enriquecer su trabajo.

Aunque durante su etapa de formación adquirió muchos conocimientos de la cultura occidental, este compositor achi´ jamás ha olvidado sus raíces, y comenta: “Tuve mucha suerte con mi nombre, porque mis padres me bautizaron como Job por su fe católica, pero este nombre también es el del rey en el Rabinal Achí y significa cinco. Sis significa pizote, de manera que mi nombre significa Cinco Pizote”, cuenta.

En esa línea de reivindicación, en 2011 fue objeto de un hostigamiento laboral con fuerte contenido racista. Inmediatamente interpuso su demanda ante la Comisión Presidencial contra la Discriminación y el Racismo, donde el fallo fue favorable a su posición.