31 de agosto de 2010
La condena al asesinato de un líder regional indígena guatemalteco va tomando auge al sumarse hoy la Fundación Rigoberta Menchú Tum, encabezada por la homónima Premio Nobel de la Paz en 1992.
Guatemala, 28 ago (PL).- Un comunicado de esa agrupación repudia el secuestro y asesinato de Lisandro Guarcax, defensor de los derechos de los pueblos originarios de este país, dirigente del Centro Cultural Sotz´il Jay, profesor y artista en el departamento de Sololá.
Guarcax, de 32 años de edad, fue capturado el pasado miércoles y su cadáver apareció al día siguiente con signos de tortura, una acción salvaje contra un guía espiritual de la comunidad maya kaqchikel, de acuerdo con el texto.
Este recuerda que suman tres los asesinatos de miembros de la propia Sotz´il Jay, pues en mayo de 2009 fueron ultimados Ernesto y Carlos Guarcax, primos de Lisandro, para acallar el trabajo de los artistas mayas.
Lisandro era un promotor de la investigación del arte prehispánico desde el teatro, la música y la danza, con un "nuevo movimiento de la juventud indígena, con dignidad y sabiduría para reivindicar el arte del pueblo maya", según el Centro Cultural.
Al exigir a las autoridades guatemaltecas una investigación inmediata para capturar a los responsables materiales e intelectuales del crimen, la Fundación Rigoberta Menchú Tum les demanda considerarlo un hecho de alto impacto.
Esa es la denominación para actos perpetrados por grupos del narcotráfico, la delincuencia común y otros cuya trascendencia golpea con fuerza a la sociedad guatemalteca y su aceptación como tal fue otorgada por el Congreso.
Por ello fue creado el tribunal de alto impacto, propuesto en una iniciativa de reformas legales de la Comisión Internacional contra la impunidad en Guatemala, instaurada de común acuerdo por el gobierno y las Naciones Unidas.
En este país los descendientes de los mayas son la mayoría, aunque la proporción es incierta, de 42 a 60 por ciento de la total población, integrada además por los originarios xincas y garifunas y los mestizos o ladinos.
También la Coordinación y Convergencia Nacional Maya Waqib Kej de Guatemala, condenó el secuestro y asesinato del líder indígena de la etnia kaqchikel, Leonardo Lisandro Guarcax.
"Condenamos enérgicamente el vil y cobarde asesinato del profesor y artista Leonardo Lisandro Guarcax, exigimos a las autoridades la inmediata investigación y castigo contra los responsables de este crimen", señaló la organización en un comunicado.
Guarcax fue secuestrado por un grupo de hombres armados el 25 de agosto cuando se dirigía a la escuela pública de la comunidad de Chuacruz, del municipio de Sololá, de la cual era director.
El cadáver del líder indígena, que también era artista y guía espiritual maya, fue hallado un día después en un apartado camino de Sololá, con varios disparos y señales de tortura.
"Esta muerte violenta se suma a los múltiples crímenes contra los guatemaltecos, que sobreviven entre la impunidad y la zozobra, pero el caso de Leonardo Lisandro Guarcax causa especial preocupación, conmoción, impotencia y rechazo, debido al trabajo que realizaba para reivindicar los derechos colectivos de los pueblos originarios, a través del arte", agregó la organización maya.
Según cifras oficiales, cada día son asesinados en Guatemala un promedio de 17 personas, lo que ha hecho de este país uno de los más violentos de América Latina.